Zacatecas, Zacatecas.
· Derechos sexuales, derechos reproductivos, vida libre de violencia y libre preferencia sexual fueron los temas centrales de las reflexiones que se llevaron a cabo durante el Encuentro Nacional Feminista 2010.
· La rearticulación del movimiento feminista permitirá avanzar a las mujeres en el ejercicio pleno de sus derechos humanos. Las mujeres indígenas se unen al movimiento
· Todas las mujeres, todos los derechos, sin distinción y con la convicción de que el respeto a las diferencias es la base para la construcción de una sociedad más equitativa.
Concluyen los trabajos del Encuentro Nacional Feminista 2010 con la asistencia de mil 300 mujeres de 29 estados de la República Mexicana y el Distrito Federal.
El objetivo inicial fue condensar nuevas formas de articulación y estrategias para fortalecer la participación política de las mujeres.
Creemos que el feminismo es una alternativa imprescindible para construir el país que las mujeres queremos, empezamos juntas y seguimos en la marcha
Al cierre de los trabajos se determinó que las políticas públicas están permeadas por una visión patriarcal, que viola los derechos de las mujeres, persigue y penaliza el ejercicio libre de las sexualidades y de la reproducción de las mujeres.
Por tanto el Comité Promotor se expresó contra la definición de los asesinatos de mujeres, por parte de sus parejas o familiares, como delitos del ámbito privado y exigieron su definición política como feminicidios.
Señalaron que el modelo económico y de desarrollo es excluyente, depredador del medio ambiente y que responde a los intereses de poderes fácticos que vulneran la laicidad del estado mexicano.
El Comité Promotor de este ENF 2010 aseguró que los feminismos en México buscan impulsar la incorporación de mujeres jóvenes e indígenas al movimiento feminista, mediante mecanismos de inclusión y procesos de acompañamiento.
El feminismo se enfrenta a intereses políticos que aprovechan parte del discurso de los Derechos Civiles para criminalizar a los movimientos que visibilizan el clasismo, el sexismo y el racismo, al tiempo en que se resignifican los discursos tradicionales contra la libertad de mujeres.
Es importante resaltar que a este Encuentro Nacional Feminista asistió una representación de mujeres indígenas que propuso a las feministas la construcción de una agenda conjunta, que incluya las diferentes perspectivas de las mujeres en todos los contextos y ámbitos y el fortalecimiento de la lucha por la defensa de sus Derechos Humanos.
A raíz de esta propuesta, en el pronunciamiento final las feministas exigieron el cese inmediato del estado de sitio que viven las compañeras del municipio autónomo de San Juan Copala por parte de las fuerzas policíacas del estado de Oaxaca y de las organizaciones paramilitares que se cobijan bajo sus alas.
Con ello el movimiento feminista ratificó su repudio a todas las formas de militarización del país y reconoció los aportes de las mujeres de Chihuahua en la lucha por la erradicación de la violencia estructural contra las mujeres.
La resolución fue volver a reunirse en dos años con la intención de acompañar los procesos feministas locales, y dar seguimiento al avance de los objetivos que se agendaron durante estos tres días de trabajo.
PRONUNCIAMIENTO POLÍTICO
ENCUENTRO NACIONAL FEMINISTA 2010
Zacatecas, Zacatecas 27-29 de agosto
Posicionamiento Político
Después de 18 años de no tener un evento similar, mil trescientas mujeres feministas de 29 estados de la República Mexicana y del Distrito Federal, nos reunimos en la Ciudad de Zacatecas con el objetivo de diagnosticar nuestra situación en el México del Bicentenario, para consensar nuevas formas de articulación y estrategias que evidencien nuestra presencia y fortalezcan nuestra participación política. Creemos que el feminismo es una alternativa imprescindible y contribuye a construir el país que queremos.
¡Empezamos juntas y seguimos en la marcha!
Este día 29 de agosto del 2010, queremos manifestar:
Que las mujeres de México experimentamos y confirmarmos un continuo agravamiento de la situación social, económica, ambiental, cultural, política y de militarización en nuestro país. Este se manifiesta entre otras formas, en la profundizacion de la pobreza, la marginación, la exclusión y la expulsión de la población; además, contamos con evidencia clara de que ello está cobrando muy altos costos a las mujeres.
En nuestro país crece la desigualdad y la violencia de estado, social y de género, la migración y el deterioro del tejido social, se profundizan los problemas estructurales, se cancelan y acotan los derechos humanos, se deteriora el medioambiente.
Estamos inmersas en un proceso autoritario. La guerra desatada desde el gobierno ha militarizado el país, criminaliza la protesta social e incrementa la persecución de las defensoras de los derechos humanos, justificando la subordinación de todo el sistema de seguridad nacional a los intereses de Estados Unidos.
Las políticas públicas están permeadas por una visión patriarcal, son violatorias de los derechos de las mujeres y persiguen y penalizan el ejercicio libre de las sexualidades y de la reproducción de las mujeres. En particular, nos expresamos contra la definición de los asesinatos de mujeres por parte de sus parejas o familiares como delitos del ámbito privado y exigimos su definición política, es decir como feminicidios.
El modelo económico y de desarrollo es excluyente, depredador del medio ambiente y responde a los intereses de poderes fácticos que, entre otras cosas, vulneran a la laicidad del estado mexicano. Éste ha sido debilitado y el regimen político simula un sistema democrático.
Es importante reconocer e incorporar en nuestras prácticas feministas una ética de trabajo que parta del reconocimiento a la diferencia femenina, en las distintas expresiones políticas e ideológicas que hemos generado, con el fin de establecer relaciones de respeto y fomentar la sororidad entre nosotras.
Los feminismos en México pretenden impulsar que las mujeres jóvenes e indígenas se incorporen al movimiento mediante mecanismos de inclusión y procesos de acompañamiento. Proponemos reconocer las nuevas propuestas de trabajo de las mujeres, recuperando códigos y lenguajes propios, para identificar las distintas estrategias estales y o nacionales que permitan construir estrategias colectivas.
La vigencia de los feminismos, tras décadas de denuncia del sistema patriarcal para alcanzar una buena vida para todas las mujeres, se manifiesta en la vinculación que las feministas hemos detectado entre todos los niveles y magnitudes de opresión de las mujeres en un sistema capitalista renovado, con iglesias más agresivas, un neocolonialsimo en los campos de la economía, las tecnologías agrícolas y en la educación, para desmantelar a la vez organizaciones feministas y comunidades indígenas. El feminismo hoy enfrenta derechas que aprovechan parte del discurso de los derechos civiles para criminalizar a los movimientos que visibilizan el clasismo, el sexismo y el racismo, a la vez que resignifican los discursos tradicionales contra la libertad de las mujeres. En particular, las feministas identificamos en la actualidad la pérdida de autonomía que el Estado tiene ante las iglesias y el capital trasnacional, lo cual redunda en un discurso fálsamente democrático para en realidad omitir la procuración de justicia para las mujeres, permitiendo la militarización de las zonas indígenas y de las ciudades fronterizas así como las agresiones de padres, maridos, y demás familiares, de la delincuencia organizada y de los agentes del Estado contra la vida, la sexualidad, la libertad de movimiento y expresión y la creatividad de las mujeres.
En la búsqueda de inclusión de diferentes perspectivas en el mosaico de mujeres que conforma nuestro movimiento, estamos caminando con base en el principio de igualdad para exigir el cumplimiento integral de justicia, desde nuestras posturas, cosmovisiones, definiciones, autodeterminaciones y autonomías. Vamos caminando por el conocimiento y apropiación de todos los derechos enunciados y por enunciar, en la formación de un mundo diferente.
En particular, exigimos el cese inmediato del estado de sitio que viven las compañeras del municipio autónomo de San Juan Copala por parte de las fuerzas policiacas del Estado de Oaxaca y de las organizaciones paramilitares que se cobijan bajo sus alas. Con ello ratificamos nuestro repudio a todas las formas de militarización del país y reconocemos a las feministas de Chihuahua por sus aportes para erradicar la violencia estructural contra las mujeres, el feminicidio en primer lugar.
En virtud de todo lo anterior, hemos resuelto volver a reunirnos en dos años en algún otro estado del país, con la intensión de acompañar los procesos feministas locales, para dar seguimiento al avance de los objetivos que hemos agendado en estos tres días, revisar las estrategias que de aquí se desprendan y fortalecer la articulación que hoy nos hemos propuesto impulsar.
Las propuestas para introducir en el posicionamiento son:
Integrar un frente de mujeres feministas incluyente que incluya:
Liderazgo, transparencia, desarrollo sustentable, uso de las nuevas tecnologías, representación de estados e instituciones, taller itinerante.
Incluir el próximo encuentro Jalisco 2010
Mujeres jóvenes con una ley de juventud con derechos de las mujeres
Fortalecer el pronunciamiento de Guanajuato por la libertad de las mujeres presas
Ampliar la visión recuperando la autonomía
Remarcar la alianza entre el narcotráfico y el Estado
Introducir la declaración de las feministas transexuales que hicieron en el EFLAC
Probablemente se realice un pre encuentro en Veracruz en noviembre hacia el Encuentro Nacional en 2013
Dar a conocer el pronunciamiento en los estados
El pronunciamiento se enriquecerá y mostrará en una semana
COMITÉ PROMOTOR ENF2010
Para mayor información comunicarse con:
Rosa Salazar 55 30 70 40 79
Ángeles Medina al 044 55 27 62 36 22
Guadalupe Martínez al 044 55 16 77 97 98
comunicacion@ encuentrofeminista2010.org.mx
No hay comentarios.:
Publicar un comentario